La fermentación del almidón de maíz para producir etanol es un proceso bioquímico complejo que requiere la monitorización de muchos parámetros diferentes (por ejemplo, sólidos, pH, perfil de azúcar, glicerol, ácido láctico y acético, y contenido de agua y etanol).
Los análisis tradicionales de laboratorio que utilizan métodos primarios (por ejemplo, la titulación Karl Fischer) tardan aproximadamente una hora en completarse y son un paso limitante para aumentar la capacidad y la eficiencia de la planta. Como técnica analítica rápida y no destructiva, la espectroscopía del infrarrojo cercano (NIRS) puede sustituir a los análisis rutinarios de laboratorio, disminuyendo los costes operativos y aumentando la eficiencia y la capacidad de la planta.
Este documento técnico describe las capacidades del moderno método analítico de espectroscopía del infrarrojo cercano (NIR) para monitorizar y mejorar el proceso de fermentación del maíz destinado a la producción de etanol.