Los ácidos haloacéticos (HAA) se producen habitualmente como subproductos de desinfección (DBP) de los procesos de tratamiento del agua. Algunos HAA están regulados por las autoridades correspondientes y se han clasificado como potencialmente cancerígenos. Tradicionalmente, se han analizado mediante cromatografía de gases (GC), una técnica que requiere una extracción y derivación de muestras que implican una importante inversión de tiempo, lo que genera mayores costes por análisis.
La cromatografía iónica acoplada a la espectrometría de masas (por ejemplo, sistemas MS de uno o tres cuadrupolos) es una potente herramienta que puede realizar muchas tareas analíticas complicadas como la medición de los niveles de μg/L de HAA en muestras de agua potable. En este documento técnico se explican las ventajas de utilizar esta técnica acoplada para la medida precisa de los HAA en el agua potable.